Papas oprimidas a la salvia



No, no le estoy metiendo política al blog ni voy a hablar de lucha de clases, opresores y oprimidos, explotadores y explotados. Aunque si uno se pone a pensar en los alimentos, en términos de jerarquías sociales, no hay duda de que las papas serían de los más pobres, de los proletarios de la "canasta familiar", así como el caviar, las trufas, el azafrán y otros cuantos formarían parte de la oligarquía o hasta de la monarquía.
Desagradecidos que somos, pues las papas han salvado de hambrunas en más de una ocasión a la humanidad y en tiempos de "billeteras flacas" nos permiten resolver muy fácil la comida del momento.
Esta entrada, como muchas otras, lo que intenta es darles una sugerencia, más que una receta, y se trata de hacer variaciones a partir de las "socorridas" papas cocidas.
Esta vez las hice con mantequilla de salvia (pueden usarse otras hierbas), pero también quedan ricas con yogurt natural y curry; con aceite de oliva, ajo y tomates secos; con crema de leche y "tropezones" tostados de tocineta; etc.
La cosa es que me parece que ellas se ven lindas así aplastadas (oprimidas) y esto les permite integrar muy bien los sabores y los aromas de la salsa que les pongamos.

  • Ingredientes
  • 12 papas medianas
  • 1oo grms de mantequilla
  • 2 cucharadas de hojas de salvia fresca picada (eviten los tallos y nervaduras)
  • sal y pimienta
En abundante agua salada se ponen las papas con piel a cocinar, cuando estén listas (lo sabremos introduciendo un palillo en el centro de una papa, debe entrar y salir con mucha facilidad) las retiramos del fuego, les botamos el agua y las dejamos refrescar un poquito. Mezclamos la mantequilla con la salvia, un poquito de sal y de pimienta.
Aplastamos las papas con la mano (o con algo plano, como un plato pequeño) hasta q
ue se "revienten" pero sin que se desbaraten completamente.
Las colocamos en un recipiente que pueda ir al horno. Repartimos la mantequilla por
encima de las papas y las metemos al horno a 200ºC - 220º C, unos diez minutos, hasta que veamos las papas doraditas y listo. Se sirven calientes, recien retiradas del horno.

No hay comentarios.: